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Manuel, de pequeño, era un niño muy travieso. Los recuerdos de su infancia son cantando con su padre cuando llegaba de la mar y él iba al muelle a esperarlo porque le encantaba jugar en el barco (mientras su padre cantaba) para sentirse un autentico marinerito. Cuando su padre ya había terminado de hacer las cuentas era cuando Manuel se ponía a cantar con él. Le regalaron su primera guitarra cuando tenia 11 años, y cuenta que le enseñó a tocar un vecino, que era heavy. Empezó tocando las melodías de los dibujos animados como Heidi, Oliver y Benji, Peter Pan, etc. Y ahora es el instrumento que utiliza para ganarse la vida como mejor sabe, cantando y componiendo. Tras aprobar la EGB, a Manuel le surgió una duda, seguir estudiando BUP o acceder a la formación profesional. Finalmente se decantó por esta última y empezó a estudiar electrónica. Pronto se dio cuenta que aquello no le gustaba nada... ”Me aburría muchísimo, tenía que tomar una decisión definitiva”. Antes de decidir dejar los estudios -en forma paralela trabajó en el rubro hostelería, pero pronto se dio cuenta que lo de ser camarero tampoco le gustaba. Había días que tenía pocas asignaturas y me iba a trabajar de camarero, pero cuando entré fijo, me di cuenta que aquello no era para mi. Veía a mis amigos tomándose una cervecita y yo allí metido..."me estaba quedando blanco como una pescadilla, así que me fui”. Manuel optó finalmente por el oficio de pintor que siempre le había gustado, ha estado cuatro años ejerciendo la profesión...”Yo quería pintar con el rodillo, que me diera el solecito en la cara”. A los 13 años se subió al escenario de sus sueños, al escenario del teatro de la Gran Vía, “disfruté como lo que era, un niño”. Desde los 13 hasta los 20 siguió subiéndose a ese escenario, con la magia del carnaval, como director y compositor de muchas agrupaciones. Manuel sentía que el tiempo pasaba, que se estaba quedando estancado...” Tenía la intuición de que algún día llegaría su oportunidad, pues llega un momento que dices, ya tengo 21 años y no me he movido de casa. En un pueblo las cosas son difíciles, no tenía recursos y me estaba ‘muriendo' a cachos”. Manuel aprovechó la oportunidad de su vida y se subió a un tren ”Se me presentó la oportunidad de "OT" y me lo jugué todo a una carta. Dejé de fumar y de salir más de la cuenta y me centré en el casting, me lo tomé con mucha seriedad” Para Manuel era su oportunidad de oro...”Necesitaba entrar en la academia para prepararme, al fin llegó el sueño, lo acaricié, lo toqué y me lo quedé” A la inexperiencia y a los miles de rivales en las pruebas de selección, iban a unirse otros problemas que no tenían ninguna relación con la música. Cuando convocaron la segunda edición no lo pensó, anotó el número y llamó. Por fin llegó el día, el casting se hizo en Sevilla, convenció a un amigo para que lo llevara y los dos llegaron a Sevilla con gran excitación. Cuando estaba en la cola se acuerda que para el casting necesitaba el DNI y se le había olvidado en Isla Cristina, (y es que cuando Manuel dice que es despistado no habla en vano). Habló con Clara, (la jefa de producción del programa) y ella le dijo que lo sentía, que sin DNI no podía hacer el casting. El pobre Manuel se fue destrozado para Isla, era el último día del casting y Manuel se sentía fatal. Sin embargo, el destino es poderoso y aquello no podía acabar así. Manuel se armó de valor y llamó a la academia, y cuando le contestaron les contó su problema y ellos le dijeron que la única solución era que se presentara al casting de Valencia dos días después. Manuel llamó a un amigo y le dijo...”Quillo, te pago el viaje, te pago la estancia si te vienes conmigo ¿vale?” Y como el mayor triunfo de Manuel son los amigos, que siempre están ahí cuando los necesita, esta vez tampoco le falló y emprendieron camino hasta Valencia...”Me levanté a las 8 de la mañana, me fui a hacer cola y allí estuve hasta las 4 de la tarde. Cuando me tocó el turno dije: Hola, soy el 3142 y canté durante 10 o 12 segundos delante del jurado” La espera había valido la pena, Manuel fue seleccionado. Una vez pasado el primer casting, puede decirse que lo que vino después fue coser y cantar. Para alguien que como él que cree en el destino, es fácil imaginarse que lo más difícil ya había pasado, aunque el camino hacia la academia aun era muy largo. El segundo casting fue en Sevilla...”Me fui con la guitarra, canté y tuve que bailar, bueno...no era bailar, era moverme, no se puede llamar bailar a eso, era una ruina bailando, vamos. Y también me seleccionaron”. Tras el segundo casting, llegó el verano y Manuel en su Isla Cristina miraba el calendario con impaciencia y se preparaba para la prueba final...”Cuando llegué y vi a tantas personas allí haciendo gorgoritos, me decía... ¿a dónde voy yo dios mío?, ¡¡unas voces increíbles!!”. Manuel sabía que la mayoría quedaría fuera, pero él se echó para adelante y consiguió pasar...”La gente iba muy preparada y yo no, eran sólo quince segundos en los que iba a poner el corazón, porque no tenía otro aval, y le salió bien". "Lo primero que se me pasó por la cabeza cuando me dijeron que me habían seleccionado, fue que se había cumplido el sueño de mi vida. Pensé mucho en mis amigos que estarían tan contentos como yo, era un triunfo de todos, tantas noches hablando de lo mismo, fue un respiro después de tanta lucha” La primera impresión de Manuel al traspasar la puerta de la academia fue de estupor. Atrás quedaban sus años de ilusiones, ahora convertidos en una prometedora realidad. Los primeros días fueron de tanteo, aunque todo sucedía muy deprisa...”Al principio me dediqué a aprender mucho y a los compañeros los fui conociendo poco a poco, y aprendí a valorar más -si cabe-, lo que es la amistad”. Los profesores llegan a convertirse en amigos. Manuel mantuvo con todos ellos una buena relación y los recuerda a todos con especial cariño. Quizá la profesora con la que Manuel lo tuvo más complicado fue con Catherine (la profe de inglés) y no por nada personal, sino porque la pronunshieshion de Manuel se resistía mucho a adquirir los matices correctos. Le gustaban muchísimo las clases de interpretación con Ángel, porque era muy importante trasmitir. Pero la clase que traía a Manuel por la calle de la amargura era la de expresión corporal. Dentro de la academia, Manuel también se encontró con sus compañeros, que compartían con él la pasión por la música. Rápidamente surgieron lazos afectivos entre ellos y la amistad se estrechó día a día. Se llevaba bien con todos y sus compañeros correspondieron a este sentimiento al verse hechizados por una bondad infinita y los ojos profundos de Manuel. Manuel no tenía preparación musical, pero tenía y tiene duende, ese duende con el que cada lunes fue enamorando a los componentes del jurado y a todos los espectadores y además fue ganando soltura en el escenario, aprendió a mantener la mirada fija y a no cerrar los ojos al cantar. Gracias a todo esto y a tener un corazón que no le cabe en el pecho, Manuel fue el favorito en muchas ocasiones. Si a esto le sumamos una voz portentosa y una pasión estremecedora, el resultado tiene un nombre: Manuel Carrasco. Manuel se metió en el bolsillo al público y al jurado, y esto le valió un segundo puesto entre los finalistas, acompañando a Beth y a Ainhoa. Con más del 24% de los votos, Manuel tenía muchas papeletas para ser elegido como representante de España en el festival de Eurovisión, y afrontó el nuevo reto con esperanza y todas las energías puestas en el desafío. El 10 de febrero se presentaron las canciones para viajar al festival, tres por concursante. Manuel tuvo que defender tres temas muy diferentes: “Viviré moriré”, “Santa Lucía” y “Sueña con este momento”. Había que descartar dos temas y el jurado se encargó de eliminar uno, mientras que los espectadores excluían otro. Así, tras unos días, la canción elegida para que Manuel representara a España en el festival fue “Viviré, moriré”, que no resultó elegida pese al 31% de los votos del público. Eurovisión se alejaba del horizonte de Manuel, pero no importaba, su futuro le esperaba con los brazos abiertos y además tenía una nueva ilusión, la grabación de su primer disco. Manuel ha tenido muchos momentos especiales en su vida fuera de la academia. El primero, la salida al mercado de su disco “Quiéreme” el 29 de abril de 2003. Finalmente, la oportunidad le llego y consiguió grabar su primer disco, que salió a la venta, el 8 de mayo de 2003. Compuso 4 de los 13 temas del disco, consiguió vender 250.000 copias. Su primera gran gira en solitario, fue la “gira Quiéreme”, le llevo a recorrer toda la geografía española por donde ofreció un total de 39 conciertos. Manuel es conocido en toda España, sale en todas las revistas juveniles, en revistas del corazón, y programas de televisión. Manuel visita oficialmente Isla Cristina, donde el alcalde le nombra Hijo Predilecto del pueblo. Acompañado por su familia, se emocionó muchísimo al ver la cantidad de gente que lo estaba esperando para compartir con él ese momento tan especial. Tras ser galardonado, Manuel pronuncia unas palabras de agradecimiento y desde el balcón del ayuntamiento se dirige a toda la gente que estaba congregada... no dudó en cantarles su single “Que corra el aire” y la canción con la que Manuel nos pudo haber representado en Eurovisión “Viviré, moriré”. El 5 de febrero de 2004, Huelva volvió a dar una alegría a Manuel al nombrarle onubense del año en la categoría de música, certamen organizado por el periódico Huelva Información y en el que los lectores votaron y decidieron que Manuel se llevara el galardón. El acontecimiento se celebró en el Palacio de congresos y exposiciones de la Casa de Colón en Huelva, que se rindió a sus pies, cuando Manuel cantó el tema que da título a su disco “Quiéreme” El 27 de marzo de 2004, Manuel se hizo con el primer puesto en el II Festival Mundial de la canción celebrado en San Juan (Puerto Rico). La canción con la que Manuel representó a España se titula “Dibujar tu olvido”, un medio tiempo que habla de desamor y que está compuesto por él. El 19 de Mayo, Manuel llega a Venezuela en un viaje promocional y para participar en el Telecorazón venezolano, un programa benéfico por la causa de los niños de la calle. En su estancia en el país, acudió a muchos programas de televisión, de radio y dio un mini concierto en la sala Margot Benacerraf, donde todos los asistentes quedaron gratamente sorprendidos por su voz, su talento y su sensibilidad encima del escenario. Desde principios de año, Manuel estuvo componiendo canciones para su segundo trabajo, que vio la luz el 26 de Octubre de 2004. Los productores de este maravilloso disco fueron Jordi Armengol, Jordi Cristau y el propio Manuel Carrasco Su segundo trabajo consta de trece temas compuestos por el propio Manuel en letra y música, trece temas que hablan del amor, el desamor y la libertad, todo ello aderezado con sonidos flamenquitos, jazz, pop, rock...un disco de lo más completo. Durante la promoción de éste, su segundo trabajo, Manuel se recorrió la mayor parte de la geografía española yendo a radios, teles, programas, haciendo firmas de discos,etc. Todo ello con un éxito arrollador y siempre apoyado por sus seguidores incondicionales. Uno de los actos más relevantes fue el de los premios de "Las uvas de oro" otorgados por la Cadena Ser de Huelva y el periódico Odiel Información en diciembre de 2004, donde Manuel fue galardonado con uno de los premios. La gira de conciertos se estrenó en Madrid el pasado 11 de febrero en Galileo Galilei con lleno total de la sala. Al día siguiente con otro “agotado entradas” en la Sala Bikini de Barcelona, donde se le otorgó el disco de oro de manos de Ricardo Campoy (Presidente de Vale Music) por las más de 50.000 copias vendidas. Dejó una crónica sobre como fue el 2º concierto de la exitosa gira: El concierto. 22 canciones, ni una se dejó por cantar nuestro Manuel Carrasco. Lo primero que me impresionó, el sonido de la Banda, limpio y compensado, nada de estridencias que afectaran a los oídos... y el niño. Voz dulce y preciosa, temía a los estragos del concierto en Madrid, pero nada de eso se le notó. Había sorpresas como las nuevas versiones de “Que corra el Aire” o la vuelta a las raíces de “Lo Bello de Mirarte” que sonó como la primera vez que se la oímos en la Academia. Me asombro la dulzura y suavidad con que cantó “Una Historia de Amor”. Sus movimientos de baile, nada estudiados sino espontáneos y al ritmo de lo que nos cantaba. Nos hizo saltar y brincar con “El Bar de los Pesares”. Levantamos los brazos con “Mantendré la Calma”, suspiramos con “¿Donde estas?” Puso fuerza, sensibilidad, pasión, dulzura, pero lo que más me asombro fue una serenidad, confianza y alegría. En ese mismo mes de febrero, concretamente el día 24, Manuel fue premiado con un galardón otorgado por la Cadena Dial que lo proclamó como uno de los mejores artistas del 2004. La gala se celebró en la Sala La Riviera de Madrid, donde Manuel fue muy aplaudido por sus fieles seguidores que no se quisieron perder el acto. A principios del mes de marzo de ese mismo año, Manuel viajó a Venezuela a promocionar su segundo trabajo. Entre los muchos actos en los que sus seguidores venezolanos pudieron ver a Manuel, destacamos el Show Case que ofreció en el Teatro Rosalía de Castro de la Hermandad Gallega el 10 de marzo. Después de volver de Venezuela Manuel siguió con su gira de concierto por la geografía española hasta septiembre del 2005. Durante más de un año estuvo trabajando en el que sería su tercer disco. “Tercera parada” , salió a la venta el 5 de septiembre de 2006 con trece temas más un bonus-track, otra vez compuestos por Manuel. EL Disco hasta ahora el más energético, hasta el momento. El CD también incluye un DVD. El día 02 de noviembre, Manuel consigue el disco de oro (más de 40.000 copias vendidas) de su último trabajo. El 28 de febrero recibió, el premio cadena dial 2006, en reconocimiento a su trabajo. El día 17 de marzo empezó su nueva gira, “gira Tercera Parada” en Huelva, donde se grabó el concierto, para que meses más tarde (el día 02-07-2007) saliera a la venta tercera parada reedición, en el que estará incluido ese concierto que abrió la gira en Huelva, en el cual el día 20 de agosto, consiguió otro disco de oro. Ahora mismo, sigue con su gira de conciertos, recorriéndose toda la geografía española una vez más como ya lo hizo en sus giras anteriores. Hasta finales de año, Manuel Carrasco estará haciendo conciertos por toda España. Algunas anécdotas en su vida Cuando Manuel era pequeño, fue que un día a las 5:00 hs. de la mañana Manuel se plantó en la puerta de su casa recién vestido y empeñado en irse a la mar y José se lo llevó en el barco. Se ve que no lo pasó muy bien, porque cuando llegaron a tierra dijo...”El agua pa los pescaditos” También recuerda que cuando era pequeño un amigo le dejo unas baquetas que había hecho con la navaja, y el las utilizaba golpeando la tapadera del wáter y el soporte donde se coloca el rollo de papel higiénico, como batería, cuenta que más de una tapadera rompió. Describe su barrio como un pequeño paraíso cerca del club náutico. Pero su lugar favorito siempre ha sido la playa y sobre todo un lugar donde están todas las barquitas amarradas, que es donde Manuel se bañaba. Recuerda sus travesuras entre las barquitas, “paterillas” como él las suele llamar. Y los momentos en que iba a pescar y a bucear entre los barcos hundidos. Otra anécdota de Manuel en su niñez, es cuando recuerda al dueño de una de las barquitas que le decía: ¡Bájate de ahí niño!, y él se escapaba corriendo como un diablillo. Actualmente suele comentar: “La verdad es que cuando estoy en mi pueblo y me encuentro un poco desorientado, siempre vuelvo a visitar ese lugar”
