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Oraciones


Angelito de mi guarda y de mi dulce compañía
no me desampares ni de noche ni de día hasta
que me entregues en los brazos de Jesús o de María


O sagrado corazón de Jesús en ti encomendamos
nuestra patria, sumérgela en el mar tu misericordía
ayudanos a edificar en ella tu reino de amor
y de justicia, de paz y de perdón
y a tu amadísima Madre Santa María de Guadalupe
nuestra señora de la reconciliación le rogamos
que nos ampare en el hueco de su manto, en el cruce
de sus brazos, mantenga nuestra nación en la concordia
y nos recuerde que somos todos hermanos Amén


Dulce Madre no te alejes tu vista de mi no apartes
ven conmigo a todas partes y nunca sola(o) me dejes
ya que me proteges tanto como verdadera Madre
has que me bendiga el padre, el Hijo y el Espíritu Santo Amén.


Niño de Atocha, general protector
de todos los hombres, general amparo de
desvalidos, médico divino de cualquier enfermedad
poderosísimo Niño yo te saludo, yo te alabo en este día
y te ofrezco estos tres padre Nuestros y Ave Marías con error
en memoria de aquella jornada que hiciste encarnado en las
purísimas entrañas de tu amabilísima Madre, desde aquella
ciudad Santa de Jerusalén hasta llegar a Belén.
por cuyos recuerdos que hago en este día, te pido me concedas
lo que te suplico, para lo cual interpongo estos méritos
y los acompaño con los del coro de los Querubines y Serafines
que están adornados de perfectísima sabiduría, por los cuales
espero, Niño de Atocha, feliz despacho en lo que
te ruego y pretendo, y estoy cierto que no saldré desconsolado
de ti, y lograré una buena muerte, para llegar a acompañarte
en Belén de la gloria Amén.


Madre querida, Virgen de Juquila
Virgen de nuestra esperanza
tuya es nuestra vida
cuidanos de todo mal
Si en este mundo de injusticias
de miseria y pecado vez que nuestra
vida se turba, no nos abandones
Madre querida.
Protege a los peregrinos
acompañados por todos los caminos
vela por los pobres sin sustento
y en pan que se les quita retribuyeselos
Acompañanos en toda nuestra vida y
libranos de todo tipo de pecado Amén.


¡Oh, señor! cuántas son las gracias de que
necesitamos, con toda verdad puede decirse
que nuestra necesidad es universal. Ahora
señor, buscamos para con nuestra Divina
Majestad, intercesores que aman sobremanera
El Anima Sola, tan empañada en nuestro favor
como grata a nuestros ojos, de lo profundo
de su cárcel te presenta nuestra indigencia
pidiéndonos las gracias necesarias para
remediarla. Miranos, pues, con ojos de
misericordia y atender el ruego de vuestra
sierva, y vos, oh Anima Sola,alcánzame a la
Divina Misericordia, el remedio de esta
necesidad que me aflige.

Lecturas,salmo,evangelio 3-01-2010



Del libro del profeta Isaías 60, 1-6
Levántate y resplandece,Jerusalén, porque ha llegado tu luz y la gloria del señor alborea sobre ti. Mira: las tinieblas cubren la tierra y espesa niebla envuelven a los pueblos; perso sobre ti resplandece el señor y en ti se manifiesta su gloria. caminarán los pueblos a tu luz y los reyes, al resplandor de tu aurora.

Levanta los ojos y mira alrededor. todos se reúnen y vienen a ti; tus hijos llegan de lejos, a tus hijas las traen en brazos. Entonces verás esto radiante de alegría; tu corazón se alegrará, y se ensanchará, cuando se vuelquen sobre ti los tesoros del mar y te traigan las riquezas de los pueblos. Te inundará una multitud de camellos y dromedarios, procedentes de Madián y de Efá. vendrán todos los de Sabá trayendo incienso y oro y proclamando las alabanzas del señor.


"SALMO RESPONSORIAL"
Que te adoren,señor, todos los pueblos.

L:Comunica señor al rey tu juicio y tu justicia al que es hijo de reyes; así tu siervo saldrá en defensa de tus pobres y regirá a tu pueblo justamente. R

L:Florecerá en sus días la justicia y reinará la paz, era tras era. De mar a mar se extenderá su reino y de un extremo al otro de la tierra. R

L:Los reyes de occidente y de las islas le ofrecerán sus dones. Ante él se postrarán todos los reyes y todas las naciones. R

L:Al débil librará del poderoso y ayudará al que se encuentra sin amparo; se apiadará del desvalido y pobre y salvará la vista al desdichado. R


De la carta del apóstol San Pablo a los efesios.3, 2-3 5-6
Hermanos: Han oído hablar de la distribución de la gracia de Dios, que se me ha confiado en favor de ustedes. Por revelación se me dio a conocer este misterio, que no había sido manifestado a los hombres en otros tiempos, pero que ha sido revelado ahora por el Espíritu a sus santos apóstoles y profetas: es decir, que por el Evangelio, también los paganos son coherederos de la misma herencia, miembros del mismo cuerpo y partícipes de la misma promesa en Jesucristo.

Aleluya, aleluya.
Hemos visto su estrella en el oriente y hemos venido a adorar al señor.
Aleluya, aleluya.


Del santo Evangelio según san Mateo: 2, 1-12
Jesús nació en Belén de Judá, en tiempos del rey Herodes, unos magos de oriente llegaron entonces a Jerusalén y preguntaron: "¿Dónde está el rey de los judios que acaba de nacer? porque vimos surgir su estrella y hemos venido a adorarlo."

Al enterarse de esto, el rey Herodes se sobresaltó y toda Jerusalén con él. Convocó entonces a los sumos sacerdotes y a los escribas del pueblo y les preguntó dónde tenía que nacer el Mesías. Ellos le contestaron: "En belén de Judá, porque así lo ha escrito el profeta: y tú , Belén, tierra de Judá, no eres en manera alguna la menor entre las ciudades ilustres de Judá, pues e ti saldrá un jefe, que será el pastor de mi pueblo, Israel".

Entonces Herodes llamó en secreto a los magos, para que les precisaran el tiempo en que se les había aparecido la estrella y los mandó a Belén, diciendoles: "Vayan a averiguar cuidadosamente qué hay de ese niño y, cuando lo encuentren, avísenme para que yo también vaya a adorarlo".

Después de oír al rey, los magos se pusieron en camino, y de pronto la estrella que habían visto surgir, comenzó a guiarlos, hasta que se detuvo encima de donde estaba el niño. Al ver de nuevo la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre, y postrándose, lo adoraron. Después, abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Advertidos durante el sueño de que no volvieran a Herodes, regresaron a su tierra por otro camino.